Coincidimos en que es necesario y siguiendo la línea que se viene desarrollando en el resto del país, incluso a nivel nacional, establecer este acuerdo político y social, en el que consolidemos y consensuemos los puntos más importantes en los que debemos trabajar, para alcanzar un objetivo común: diseñar y reafirmar políticas de Estado fundadas en el diálogo, que nos permitan transformar la realidad de nuestra ciudad, que tanto nos duele.

Esto no se trata ni de incorporar nuevos actores al gobierno ni mucho menos de forjar una nueva alianza electoral, sino de alcanzar un acuerdo programático en el que se dejen de lado nuestras diferencias para encauzarnos bajo un mismo objetivo, porque es hora de alzar una misma bandera: la de nuestra querida Concordia.