Concordia, Entre Ríos ARG
Miércoles, 24 Abril 2024
   
Información General  Lunes 29 de Mayo del 2023 - 11:17 hs.                530
  Información General   29.05.2023 - 11:17   
Opinión por el Diputado Gustavo Hein*
40 años de democracia ininterrumpida: Argentina necesita un pacto.
En estas épocas de definiciones, más allá del proceso electoral en ciernes, me gustaría hacer un aporte que espero ayude a reflexionar. Reflexionar, no sólo puertas adentro, sino también en los espacios de discusión de la ciudadanía, que próximamente deberá elegir a quienes conduzcan los destinos de su ciudad, su provincia y nuestro país.

Argentina cumple 40 años de democracia ininterrumpida y se encuentra

atravesando una crisis permanente en prácticamente todos los planos de

la vida nacional, que cada día que pasa parecen profundizarse aún más; este

escenario nos hace vulnerables, limita nuestra capacidad de acción y

daña progresivamente nuestra calidad de vida.

Estamos sumidos en una realidad que no nos gusta, que nos lastima y

nos hace daño. La certeza de que 2 de cada 3 chicos en Argentina son pobres

nos golpea y nos avergüenza, del mismo modo nos duele no ofrecer soluciones

concretas. Nuestros problemas sólo pueden vencerse con la voluntad y la

contribución de todos los actores de la política argentina. Quien diga lo

contrario estará mintiendo con fines electorales.

La política – en la cual me incluyo -, debe tener la capacidad de superar

nuestro historial de enfrentamientos y frustraciones para dar respuesta a

una sociedad cada día más indignada y empobrecida. Debemos lograr

saldar las deudas del pasado y pensar en un futuro que nos integre a todos,

como lo hizo la España de Adolfo Suarez en 1977, con su Pacto de la

Moncloa, hoy un hito indispensable en el camino de la recuperación

económica de un país acechado por la pobreza. España, en aquel entonces,

entonces padecía una inflación del 40%, un desempleo creciente, una balanza

comercial desfavorable y un electorado altamente fragmentado, a cargo de un

gobierno que había arribado al poder con el 35% de los votos.

Las reformas de fondo que demanda la Argentina, requieren de amplitud y

sólo son posibles fortaleciendo nuestra democracia y nuestra república a

través de acuerdos sólidos e inclusivos. Es necesario que todos los partidos

políticos y los actores de la vida nacional, dejemos de distraernos en discutir

internas, que profundicemos en el análisis de los medios y métodos que

permitan sacarnos del caótico estado de declinación permanente en que

vivimos y, es fundamental, que los dirigentes abandonemos nuestras

apetencias particulares.

Nuestra energía debe estar puesta en encontrar un camino robusto y

estable de reconstrucción, que, dada la intensidad de la crisis, exige

consensos básicos que permitan implementar a su vez medios idóneos para

conjurarla y a fin de que aquellos no mueran en una simple expresión de

buenas intenciones.

Podemos ser articuladores de un mejor Estado, moderno, eficiente, donde

prime la calidad institucional, desde el cual impulsemos una economía

competitiva y abierta que mejore nuestros indicadores. Donde la sociedad que

lo habita no corra peligro producto de malas decisiones políticas.

Debemos ser sensatos y ejercer nuestra responsabilidad política sin

mezquindades y con la altura que merece la extrema gravedad de la situación.

Superar la crisis con éxito depende de nosotros.