Cuando el encargado y seguridad estaban cerrando, fueron abordados por un delincuente, que pasaba caminando por el lugar. Una vez que los redujo, les ató sus manos.
Según Diario Río Uruguay, el ladrón se habría llevado una suma cercana a un millón de pesos y, según se anticipó, las cámaras de seguridad serán fundamentales para determinar qué es lo que habría pasado y quien sería el malviviente.