Al realizar el contralor del rodado con el can “Gringa” y su guía natural, la misma se altera evidenciando conductas propias ante la presencia de estupefacientes. Ante esto se da intervención a la División Tóxicos de la Departamental Federación.
Ya constituido el personal especializado y con conocimiento de la justicia Federal, jurisdiccional de turno, se realiza la apertura del rodado hallándose y secuestrándose 60 envoltorios tipo ladrillos y 10 botellas con picadura un total de 30, 690 kilogramos, dinero en efectivo y telefonía móvil.
Además se procedió con la inmediata detención de las dos personas que se conducían en el vehículo