El viernes 24 del actual se concretará la primera huelga, en tanto que la segunda está prevista para la primera quincena de noviembre, con fecha a definir.

La determinación la adoptó, por mayoría, el congreso de Agmer, aunque ya de antemano se prevía que ése iba a ser el camino.

Antes que privilegiar a sectores de poder, el Gobierno debe convocar al diálogo a los trabajadores

El Gobierno cerró en marzo la discusión salarial con los docentes, y ajustado en sus cuentas, declinó sentarse a negociar una nueva suba para el segundo semestre.

En abril último, y con intervención de la Justicia (que dictó la conciliación obligatoria a pedido del Gobierno) la administración del gobernador Sergio Urribarri acordó aplicar una saba salarial para el sector docente, en etapas.

El armisticio sólo se hizo efectivo en abril cuando por fin el Gobierno propuso elevar el piso salarial docente, de $ 3.416, a $ 4.544 en marzo (un aumento del 33%) y en agosto, a $5.000, con un incremento acumulativo del 46%.